lunes, 20 de julio de 2009

Protesta


(Para ese amor posiblemente, imposible).

Tu amor es mi plegaria
que Dios se niega escuchar
Tan solo río llegando al mar
agua bajando el vacío.

Pequeña demencia mía
sellar mi ilusión con un beso
¿Por qué sufrir por quien jamás llora?
¿Por qué morir por quien jamás sufre?.

¿Cómo sepulto este deseo?
tan indómito como el diablo.
Si te largo de mi mente,
te asilas en mi pecho.

De que forma conquisto la vida,
sino acaba la utopía
de sentarme a tu mesa
compartiendo mi techo.

Quimeras


Tengo un sueño atrapado
entre la quimera y la locura.
El ansía loca de volar alto
sabiéndome desterrado y ajeno.

Me abundan miles de instantes ingrávidos
construyendo la historia de mi vida.
El corto verano de la juventud
está marchándose con el ocaso del día.

El otoño asoma tenue y frágil
pero también gigante y doloroso...
y mientras tanto vive adolescente en mi
la consigna febril de mis pasiones
la hueca terquedad humana
de querer hallarte
aún en el final mismo de mis días.