Entre copa y copa
quise yo un minuto de silencio
mientras anulaba con el licor
el inmenso recuerdo que te guardo
Pero entre copa y copa
desde el fondo de la botella
te fui poco a poco llamando
y la conciencia se me torno lamento
La noche es muy breve
para conquistar tu olvido
Hay más de ti en mi
que estrellas en el firmamento.
De menos a menos siempre
logro huir de mí mismo
escapando al laberinto de mis delirios
y ya muy lejos de mí
aún allí existe algo muy tuyo
Entre copa y copa
quise gobernar tu silencio
pero tu voz somete a la distancia
y mi nostalgia al tiempo...
(Talara un día después de la fatal acción fementida. Algunas veces es muy difícil decir adiós primero y más fácil clavar el puñal certero de la desgracia por la espalda. Es que algunos seres son más valientes traicionando que dando la cara).
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