viernes, 21 de diciembre de 2012

Vuelve

(De mi silencio para tu ausencia)

Te llamo desde mis silencio
para compartirte mi soledad.
Te escribo desde mi eutonía
en posición de maestro pensativo
para jugar con la expresión de los sentimientos

Sigo aquí, esperando junto con el viento
para poder recorrete toda.
Vieja vocación de viajero
al caminar los senderos que marcaron el alma
al vivir los recuerdos
como si fuera una segunda vez.

La rosa del tiempo marchitando siempre
en el florero del cuerpo
despide sus últimos colores
como queriendo no irse nunca
y un aroma ya casí extinto
anuncia que la muerte ya viene...

Sigo aquí atrapado de mi mismo
por mis enconos, mis incognitas
sucumbiendo a mis apetitos arcanos
a mis nunca extintas alegrías cortas
como el alimento de tus besos
y el febril naugráfio en el mar de tu cuerpo...


lunes, 17 de septiembre de 2012

Soldado Fiel



Tú me has dado bendiciones Dios.
Mi brújula cuando los pasos eran inciertos
y abrigo cuando era frío el camino,
La limosna y el mendrugo de pan
que calmó mi hambre y mi sed
cuando no había esperanza, ya.

Tú me has hecho fuerte Dios:
Centurión forjado en el fuego de tus desafíos
he librado las batallas de la verdad
Pero has sido tú, la espada, el escudo
el yelmo que protegió el pensamiento
y el atuendo que dice de los tuyos soy

A dónde me envíes tú, iré
a conquistar o recuperar no lo sé
sólo sé cumplir sin murmurar
y si los dardos del enemigo
de muerte mi cuerpo hiere
sé que moriré mirándote
a los ojos con dignidad mi Dios.

Algún día de los tuyos
mi conciencia volverá a su cuerpo
vasallo fiel, de tu mesa comeré
porque así como ahora mi espada te pertenece
mi voz seguirá siendo tuya
y la voluntad lo que tú dispongas allá.

Soldado tuyo soy mi Señor
mucho más que ayer
mucho menos que mañana.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Silvia Elena

Hoy nostalgia de ti tengo
y acepto que tu ayer es el presente que dejas
pues el vacío no solo es ausencia de materia
son también los recuerdos que asila el alma

Ya no son tus pasos entre los nuestros
ni se cruzaran más, los amenos saludos…
Aquí en Santiago el día es triste, frío, gris,
y llora el cielo junto conmigo

Le suplico al viento lleve ante ti
alguna lágrima esquiva
que mi dolor delata
mis ruegos y mis plegarias
que desde aquí no te alcanzan

Condena de la que nadie escapa, es la muerte
y no sé si contigo es consuelo o desgracia
sólo sé que hiciste tus victorias con esfuerzo
y abrazas hoy la gloria del cielo toda
con el dormitar del siempre ausente.




domingo, 26 de febrero de 2012

Nostalgia

Me duele quererte como te quiero
porque solo tú llegaste a ser
mi mañana, mi ayer
y un presente de largo verano...

Me asfixia la nostalgia de tu ser
porque tu recuerdo es aire que mal respira el alma.
Mis manos ya no son gaviotas azules
buscando anidar en tu cuerpo.

Sin ti ya no soy naufrago en el mar de tus besos
y de ser tu clandestino pirata
mi ser es hoja que empuja el viento
mas comprendo que tu retorno es una novela de Verne

Eres dueña de mi tiempo, espacio y distancia
y aunque tu misericordia me concede el perdón
tu mente anuncia: " Poca rosa, mucha espina"
para éste mal parido amor...

Ave Fenix

¿Quién eres tú?...
Que me detiene y entretiene
secuestras mis razones
aniquilas mis ideas
combates mis penas, mis tristezas…

¿Por qué tú?
Domas mis ansías
sometes mis antojos
y como leña seca ardo hasta consumirme
mientras me tienes entre tus manos

Mi vida es un paisaje sin colores grises
donde el sol y la luna iluminan juntos
porque mis días ya no tiene noches
y las noches las llevaste no sé donde

Paso por tu ventana
ausente de ti éste mes de verano
y el viento me regala tu aroma
solo para decirme que no has partido

Vivo atado a tu cintura
narcotizado de tus palabras
tus caricias son pinceles
pintando sonrisas en mi rostro

Y a todo esto, me pregunto
¿Quién eres tú?
para hacer magía con mi vida
¿Por qué tú?
me has convocado a la vida
desde la muerte mía...


domingo, 22 de enero de 2012

Tu ausencia

Santiago está de verano cálido
y una fría lluvia cae en mi mesa.
Sentado con la mirada en el pasado
busco entre imágenes grises
los ojos que me dieron vida;
la boca que me dijo prosigue.
Una fogata arde en el quincho
y como ella mi corazón quema con la nostalgia.


Nacido para dar con un amor sin retorno,
es tu olvido un cerrojo que no logro hallar
una ventana que aún en la noche
si no deja pasar la luz,
deja llegar el murmullo de tu nombre.


Santiago, tiene sol en demasía
pero es muy menos de lo que me hace falta
solo porque cometes ausencia.
Si tan solo supieras como tiembla mi mano
tratando de escribir lo que siento
y como se me ahogan los lamentos
tan solo con rememorar tu cuerpo.


Pirata navegando un mar de rojo amor
voy siendo asaltado por tu nave de bandera blanca.
Sin tiempo, sin permiso y sin tregua
me quitaste el timón, raptaste mi brújula
no sin antes cañonearme la razón y la cordura.

viernes, 20 de enero de 2012

Para quien ahora rapta mis neuronas

Hola a todos y especialmente tú, si tú mi novia (espero aún)…
Hace unas semanas atrás, cometí uno de los errores más groseros, echo que traté de subsanar escribiendo por este medio, una proclama de disculpa, a carta abierta y cabal, de quien pronuncia hacia la Hermana Rodríguez. Un clavo saca otro clavo y si una vela s ...e apaga otra se mantiene encendida reza de diferentes maneras en las distintas sociedades de este planeta ambos estribillos.
Por otro lado tengo y sufro un amor santo padeciendo en los últimos días, un amor en cuarentena, nacido entre espinas y no hay calmante alguno. El silencio es una calamidad una vorágine de angustias, odio, furnia, impotencia y hastío, mientras se anidan todos entre mi cerebro y mi pecho y es mi garganta quien desea escupirlos.
No puedo, no deseo ser tan protocolar, pero admito que al leer siempre tú, lo que escribo con vehemencia quizá insana, quizá impertinente ofusque tu tolerancia y paciencia. Admito ser díscolo, extrovertido, anacoreta, cavernícola defendiendo con pasión y vehemencia mis ideas, muchas ya dispares de  mi ahora oscurecida esencia, pero así soy yo, siempre voy tras lo que quiero, no me gusta la derrota, soy combativo aunque lamentablemente por donde pase no vuelven a crecer las rosas, y por desgracia el más bello jardín que representabas se queda sin primavera y las rosas frescas que poseías pierden sus pétalos como consecuencia de ir arrancando una tras otra, son lágrimas que una vez caídas no volverán a dar color, belleza, aroma, no serán más sonrisas ni ternura. Me anticipaste muchas veces, pero altivo y esquivo fue águila que no caza moscas por volar alto y sin saber hasta ahora que eres el amor que siempre estuve tentándole a la vida y reclamándole a Dios. Conoces mi norte y mi sur, mis miedos, mis iras, mis mitos y mis leyendas incluidas mis furias, sé que te cansaste de tener que someterme para tenerte tan solo un minuto a tu lado, pero así te hiciste fuerte, lograste ser mi domadora y yo sin querer admitirlo, no por ciego sino por necio, por no ceder a tus encantos o derrotar mi miedos, soy un rey que se quedo sin reino y vivo esclavo de quien aspiro sea siempre mi reina, mi esposa, mi amiga, mi domadora, aquella que con una sola mirada le da respuesta a lo que estaba pensando, me conoces tanto que sueles ser más de una vez un excelente espejo donde puedo ver mis taras y virtudes.
Lo pasado, pasado es y no vivo de recuerdos, divagando entre lo que fue y pudo ser, no vivo con dudas en el cerebro, siempre tomo al toro por los cuernos y aunque sea yo el que pierda prefiero eso a vivir como un enano mental tratando de dar respuesta a preguntas que jamás serán respondidas por quien ya no ocupa lugar en mis sentimientos. NO tienes competencia, no deseo quedarme solo viendo morir los planetas que juntos creamos y las estrellas que matemáticamente ubicamos pierden luz y los cometas se extravían no se donde. Me quede adicto a ti, a tu ternura, tu humildad y sabiduría, tu magia y tus misterios y no por eso oscurantista, eres mi mejor complemento, eres el verano a mis inviernos.
Lamento no poder entender nunca tus celos, pero soy yo quien los parí y los sobrealimente, no hagas o hagamos una eutanasia de todo esto, aún hay mucho que vivir, aún deseo pedir tu mano y vestirte de blanco, mis manos siguen blancas (aunque algo callosas por el trabajo), pero sanas y fuertes moralmente, para ampararte, protegerte y suaves para acariciarte, sin que lo pidas.
Todo mal se repara hasta donde es posible y ésta epístola desboca desde el fondo del alma, solo es parte del proceso, proceso que tan solo tú y yo entendemos…
Al concluir, me confieso enamorado, tu sumiso esclavo y voluntarioso rey, te amo.
Pacoswaldo