martes, 14 de julio de 2009

Misiva


(Para la que fue, es y nunca dejara de ser)

Te escribo con tinta roja
como la sangre de mis venas,
como el vino más amargo,
como el dolor de Cristo.

Te escribo desde mi rincón esquivo,
alejando del mundo y su amenaza,
escribo con amor de samaritano
y fe de ciego, creyendo solo lo que oye.

Escribo sí...
Siempre escribo desde mi privado universo,
contando mis galaxias,
jugando a ser Dios con lo que es mío,
siendo rey de un imperio sin Vasayos,
de un esclavo que se quedo sin ama.

Maria Yojana


Quizá me recuerdes en algún momento
tratando siempre de velar tu camino
hurgando alguno que otro artificio
sin importar recibir más de tu olvido.

Talvez tiriten tus labios
evitando pronunciar mí nombre
y te enojes contigo misma
...por evocar mi recuerdo,
luchando por llevarme a tu olvido.

Alguien te dará su vida en una sonrisa
buscará sentarse a tu diestra
te rendirá homenaje en un poema, una rosa
será incondicional, como lo fui yo.
Y me buscarás en el brillo de su mirada.

Alguna vez alguien llorará contigo tu tristeza
le pondrá alas a tus fantasías
y te dará estrellas para iluminar tu destino
… murmurarás mi nombre porque ya lo has tenido.

Alguien te ungirá y te bendecirá en la cabeza
sentirá del mismo Dios la grandeza
y volverá a ti la paz que yo quise darte
y en una lágrima esquiva sabrás
lo mucho que me amaste,
lo mucho que perdiste…

Llegarás a la casa santa
para ti se abrirán las puertas del cielo
sellarás tu eterna alianza
y en un haz de luz te veré echa un ángel
entonces donde me encuentre
caminaré al encuentro de tu olvido…

Mi novia ला muerte


La muerte es una novia vestida de negro
aguardándome entre las sombras
esperando en el altar mi llegada
tiene por flores, espinas cubiertas de sangre
y el velo hecho con pétalos negros…

La muerte es una novía que espera
incansable, esmerada, ansiosa, cauta
es coqueta, dura y fría, la amada perfecta
jamás busca mi encuentro, mi presencia
y sin embargo, no puedo huir de ella.

La muerte tiene la paciencia que me hace falta
pero le falta la ternura que me sobra
su mundo es oscuro, arcano, apocaliptico
es insufrible, indolente, parca y sombría
pero le falta los colores que dan la vida

La muerte viene a pedir mi mano
me trae besos muertos y caricias áridas
sus palabras son sarcasmos, insolencias
llega con su aroma de amoniaco fresco
y la sonrisa tétrica, subterránea. Me voy.