María Guadalupe

Soñaré contigo
con la tibieza de tu cuerpo
lo cálido de tu boca
…y lo simple de tu piel.

Soñaré escuchar tus suspiros
ahogándose en sabanas blancas.
Arando mi espalda tus manos
…y mordiendo mi boca tu boca.

Soñaré sentirte húmeda y extensa
en una explosión de orgasmo
como si tus brazos tocaran el cielo
y tus piernas se dieran al mundo.

Te soñaré esquiva y sediciosa
seduciendo en tu negativa,
…llamando con la mirada
atacando con toda ira.

Trataré de sentir tu vientre
cual volcán de aguas termales
…tus labios inundados en deseo
surcando dilataciones de mi cuerpo.

Te lactaré en efusiva angustia
como si tratarás de allí tragarme
mientras mis manos
se unen al bosque de tus cabellos.

Te soñaré yerta del cansancio
extinta de tus emociones
frágil, suave e intensa.

Esa hembra

Me muero por saber...
Si muerdes, si gritas,
si imploras, si maldices,
si gimes para afuera,
si gimes para adentro…

Te imagino envuelta toda
entre mis brazos,
frotándote entre mis pelos,
atacando por sorpresa,
implorando en la derrota,
expulsando tus orgasmos.

Te deseo intrépida, atrevida,
desvergonzada, zorra, mañosa.
Sin aspavientos, sin tabúes ni tapujos,
te necesito hembra, ardiente, puta.

Me inquieta saber...
si te mojas al tacto,
con el rose de mi boca,
...si juegas o esperas,
...si enfrentas o huyes
...si blasfemas u oras.

Me muero por saber…
Si ríes, si lloras
si golpeas, si acaricias,
si te sientas o te paras

Amor Maniático

(Algunas veces, algunas mujeres, nos llevan a nuestro ignoto lado
oscuro, del que no queremos o no sabemos volver…)

Celos tengo de tu risa loca
del perfume de tu almohada
del agua con que te bañas
y de la toalla con que secas tu piel mojada.

Celos de la brisa fresca
que te sigue, persigue y acosa
aunque no lo quieras.
Y, aunque no lo quieras...
también te mima, te abraza, te besa, te toca.

Celos, celos, celos, malditos celos.
Celos de tu mirada, tu sangre
de tus enanos sentimientos.
...de la selva de tu recuerdos.

Celos, celos, celos, únicamente celos.
Celos que matan, que devoran, que arrasan
que aniquilan, que trastocan, que queman...
…de tus caminos tuertos
…de los umbrales de tus abismos.

Celos de tu narcisa mirada
del espejo donde reflejas tu maniquí anatomía
del francés aroma en tus mejillas...
De la danza de tus caderas
con el tamboreo de tus pasos.

Celos, celos, celos, paranoicos
de tus líquidos grasos
en los antros de tu cuerpo.
Del fuego de tus besos,
de caricias fantasmas y tus amores platónicos...

Celos deletéreos, sádicos y violentos
de tus zarcillos, elevaciones y pendientes
de tu atiborrado maquillaje
de tus aciertos y tus sandeces...

Celos, únicamente malditos celos
hijos de este amor maniático.
Paranoicos celos, paridos en tu sexo
celos que intoxican la vida,
el alma y los sentidos.

El qué dirán

Si porque te dicen
qué dijeron
que yo había dicho
eso que nunca dije
pero muero por decir
muy cerquita de tu boca.
en otra boca
me vas a olvidar.

Espero sepas tú:
...que ellos saben
lo que yo no aún no sé
y no lo sé
porque nunca lo he dicho.

Si amarás como yo amo
y sufrieras como yo sufro.
entonces todos los que dicen
que dijeron que yo dije
se alejarían de ti.

Si porque otros vieron
lo que tú no viste
pero la verdad quieres saber
recuerda que aquellos que vieron
nunca vieron
lo que quisieron ver.

No lo digas

No digas: ¡No!…
No lo digas nunca más.
Que ya voy entiendo tu murmullo
y sé que no pertenezco a tu mundo…

¡No lo digas!. No por favor…
Que me marcharé en silencio
justo al caer la tarde
como esa tarde cuando te pedía amor.
No hables más que tus palabras duelen
y es mi amor el que sufre.

Dedícame tu demencial silencio
es todo lo que pido…
solo hasta la tarde cuando me haya ido,
como esa tarde cuando te di mi amor.
No me duele la despedida
me duele más amarte tanto.

Mi amor te lo di fuerte y sano,
para que diera sombra en los veranos
y protegiera de los inviernos

Mas no digas ¡No!. Solamente, calla...
que no volveré a invadirte…
ni a rondar tus pasos.
solo cuida de la nena
la que no podré cubrirle siempre con mis brazos
solo para no malograr tu camino.

Me voy tras un sueño, un destino, una vida
esos que no quisiste formar…
me voy tras quien quiera dármelos
y apostaré nuevamente sin temor a perder.
por último, no lo digas nunca más…

Reconozco la derrota
me voy ciego con mi sentimiento a cuestas,
con la ilusión extinta
y las ganas locas de querer
como nunca nadie ha querido...

Llegó la tarde…
no hables, no sufras,
no sirven las despedidas.
Déjame besar a la nena
y solamente adiós.

Destierro

Taradeces del alma
callar cuando se quiere gritar
desde el inmenso vacìo de la soledad
toda la deseperanza y agonizante llorar.

Tratados de honor y sepulcral silencio
el dejarte cantar, volar, soñar y huir.
El amor es un momento que se merece
y como suave brisa llega y se desvanece.

Si hoy ya no me quieres
si ya no soy el dueño de tu cariño.
Es mejor dejar espacio en tu camino
tu recuerdo será mi luz, será mi sombra.

Y me quede triste sin saber...

Y me quede triste sin saber de ti...
¿Qué será de mí ahora que ya no estás,
en está mi marinera vida
de andar píndaro y gitano?.

Tengo siempre junto a mí
la sombra de tu amargo recuerdo...
Y si lo bueno sabe a mal
porque entonces el hondo daño.

Camino mirando solo mis pasos
…las estrellas ya no tiritan
y mis manos solo tienen el refugio
del gabán viejo ennegrecido.

Mi pipa ya no quema tabaco
...ya no sé meditar
se me quemó la conciencia
y mi barca surca nuevos mares.

Atrás quedaste. Anclada al puerto
del que no volveré jamás
nada tuyo navega a mi lado
…Solo este, tu maldito recuerdo.

Atila & Alejandro

En un pequeño libro
escondo los recuerdos
los que son versos
y los que son salmos.
Tras una ventana de humo disfrazo
toda la realidad que no fue.
El rostro duro y frágil
de impavidez se humedece.
Duele ser héroe…
lograr la hazaña que te da la victoria
la derrota que me corona de soledad…
como duele respirar así la vida
…como tortura la gloria
que te da la muerte.
Yo no hice el mundo
pero fue echo a mi manera,
simplemente debo vencerte.

Desolación

(Con María Alejandra. Mi gratitud por confiar en mi para escribir juntos).
Te quedaste en mi nostalgia,
con presencias del pasado.
Fúnebres huellas ingratas
surcando la razón,
hendiendo el corazón

Seguiré viviendo
aunque me duela el alma.
Te detuviste en aquel tiempo
marcado por la zozobra
atrapando los recuerdos
sellando los sentimientos.

Esos que dieron tanto
solo para recoger tu olvido.
Seguiré viviendo
aunque se me quiebre el alma.

Seguiré marchando.
Seguiré existiendo.
Seguiré amando,
siempre sobran razones.

Si necesitas apoyo
te doy mis pasos.
Te extiendo mis brazos.
Vale la pena intentarlo…

Renunciamiento

(De un rey sin reino y un esclavo si ama)

Estoy aquí, ebrio de amor y olvido
ahogado de tus recuerdos
quemando muy dentro mío tus besos
helándome el corazón tus caricias
asfixiándome con el aroma de tu cuerpo.

Estoy aquí, hecho menos que hombre
mendigando a Dios tu pronto olvido
pero tu olvido es un Cristo venciendo la muerte
es un santo que no hace milagros.

Estoy aquí riéndome conmigo mismo
claudicando a ser el amo de tus sueños
guardián celoso de miradas ajenas
Creyendo aún, que en ti la ternura se hizo hembra
creyendo aún, que tuvimos una vez primera

Estoy aquí, en el mismo rincón del mundo
donde me hallaste, donde me dejaste
para proseguir escribiendo mi historia
vacía de tu fe, llena de tu ausencia.
Jamás falta lo que jamás se tuvo.
A ti no te compré. Te vas. No te vendo.

Nostalgia

Tengo el corazón encadenado
a la puerta de tu casa…
y mí cerebro partió no sé dónde
tras la huella de tus recuerdos.

Tengo cúbitos de azúcar
para hacerme dulce la vida…
y una rosa que marchita
por ausencia de la agüita de tus ojos…

Tengo un arco iris sin color
tu estrella ya no tirita a lo lejos.
y a lo lejos un perro aulla
conmovido de mis lamentos.

Tengo la vida en agonía.
Si no regresas pronto
seguiré buscando tu rastro
Si no lo hallara nunca,
Yo muero aquí…

El Paisaje de tu ausencia.

Ya no estás serrana.
sólo seco el huerto
que fue arado con sueños y esperanzas.
no queda agua de ese manantial
para regarlo en la primavera.

Las mañanas del invierno son frías
y lastima mucho florecerlo.
ya no está la vieja tonada
que acompaño la misma canción
en cada encuentro…
en cada declaración.

Se murió la rosa rojo vivo
la que se alegraba en cada cita
esa que despedía aroma de pasión.
no estará más el retrato
que fue gesta directa
como la esperanza del moribundo
que pedía asilo en tu pecho.

Ya no oirás más esas cuitas
en oraciones rimadas
cuitas que anudaron
el amor y la desilusión…

Tu diestra vacía estará
cada fin de semana
para no escuchar serenatas
cantos que solo besaban tu frente
pero jamás los escucho tu alma,
ni aplaudió tu corazón…

Desdoblamiento

Espérame en ese tu rincón del mundo
allí donde no hay tiempo ni gravita la soledad
aquél rincón dónde la esperanza se hace verdad
y tu amor, es la primera regla de tu universo.

Aguárdame sin reloj ni calendario
que ya llegué mucho antes que partiese
ingresé por tu ventana, la que mira al sur
y en una suave brisa, tu boca ya bese.

No quise despertar tu sueño de ángel
ni agitar más tus alas, cansadas ya de volar.
Me abrazo tu ternura, tu calidez
y sin más poder ante tu imagen lloré.

En mi vive aún la fragancia de tu alcoba
los colores de tu vida, llenos de brillo y luz.
Tus pies pequeños delicados y fuertes
con la manta cubrí y te cubrí de amor sin que lo supieras.

Espera solo un poco más…
que mi barco se quedó sin mar
y mis alas sin viento…
Voy lento y a pie, sufriendo la agonía
sangrados mis pies, pero siempre más cerca de ti.

Tú, Mí primera vez.

Tú, Mí primera vez.
Brindo por ti y por mi en la distancia
por esa mi vez primera
en la madrugada azul que me diste
llena de virginidad, inocencia y miedo
vacía de odio, tormento y soledad.
¿Te diste cuenta?.

La gloria se hizo luz en la penumbra
mi boca conoció tu boca
mi cuerpo se acomodo al tuyo
y aspiré tus secretos aromas. ¿Recuerdas?.

Como no amarte ahora
que los recuerdos mi cerebro raptan...
como no llorarte siempre
que mi ser necesita el tuyo...
como no implorar tu regreso
si soy por siempre de ti adicto. ¿Lo sabías?

En ti la magia se hizo sonrisa
gaviotas en libre vuelo tus manos.
Tu garganta alentaba mis malogrados intentos.
En ti la ternura se hizo mujer. ¿Recuerdas?.

Nos llegó el alba fresca del incipiente otoño
y la claridad delato tu tigreza figura
la erección débil, mi rápido orgasmo.
Me hice hombre entre tus piernas mujer. ¿Recuerdas?.

Me enseñaste a navegar tu cuerpo
tus besos fueron mi puerto
surqué el desierto de tu espalda
el oasis pequeño de tus astrillas
la inmensidad de tus nachas
la fuerza volcánica de tu vientre
la sensible maternidad de tus pechos
y el sismo que provocan tus caderas...
Fue así como te hiciste mi sangre, mujer. ¿Lo sabías?.

Asesinaste mi pureza
confiscaste mi fe y mi devoción.
Te hice mi santa, mi reina
me proclame tu devoto, tu lacayo.
Tu esclavo y tu rey. ¿Recuerdas?.



A Magu. En la eterna primavera, en un memorable 5 de abril

Fue por la madrugada y no me acuerdo

Serena como tímida
me anticipaste no comentar mi hazaña
sangrarme los labios con mis palabras
al inscribirme en tu vida,
en callar yo y la cabaña.

Abrasabas la cama derritiéndote en ella
tus manos pidiendo amara tu cuerpo
y las bocas declarando el deseo,
cuando rechaza tu vulva cosa extraña.

Me pediste el silencio de mil tumbas,
en una noche que rompió el alba.
Mujer piel ebúrnea,
deliciosa carne, jamás verdaderamente estrujada.

Tus ojos perdieron la mirada
revoloteaban cisnes en mi cuello
al momento de lactarme tus pechos.
Avivando el juego, tu vientre se estremecía,
se contorsionaban tus caderas.

Tanto que contar y callar.
Alguien preguntó tu nombre
mis labios lo olvidaron.
… fue por la madrugada y no me acuerdo.

Don Juan

Confieso al viento
lo que el viento sabe ya,
tener dos amores y más
y amarlas mucho por igual

Vivo doblemente enamorado y más
y ser leal a cada cual
sin que cada cual sepa
que otros amores me atrapan ya

Las amo con fe de santo
con amor febril de adolescente
la intensidad de un bardo
y audacia de un gitano marinero

Existo en sus demenciales locuras
existenciales reproches.
Habito entre cándidas caricias y ardientes noches
en libros que ya nadie lee
y cálculos numéricos que a nadie importa

Me amán con celo calmo, apasionado, paranoico
extralimitando el sentimiento y el deseo
con la vorágine de una tempestad
en la distancia de las estrellas
y silencio inquebrantable de muerto.